Un muchacho de mi pago anda cantando chacareras en Galicia. Julio Teré hace bailar a los españoles nuestros ritmos folclóricos y hoy nos cuenta el estreno de su primer disco, grabado en Santiago del Estero.
Hace 14 años tomó rumbo hacia España buscando nuevos horizontes. Lo que no imaginó es que los bares y los teatros de Galicia, donde vive en un pueblito antiguo, o que la distante Valencia, iban a ser escenario de sus zambas y chacareras.
“Me vine a vivir a Galicia en el año 2006. Acá formé mi familia junto a Silvia y hace cuatro meses nació nuestra beba, Ayelén, que es un nombre mapuche y significa Alegría. Estoy en España, pero le pusimos un nombre bien argentino. Acá trabajo en una industria de alimentos para mascotas. Estoy viviendo en Ribadavia, un pueblito de Orense. Tiene menos de cinco mil habitantes. Es un lugar con mucha historia. Acá hay castillos, la judería junto al río Avia, lugares muy antiguos”.
“En Galicia la música es muy diferente al flamenco de Sevilla y por supuesto a nuestra música. Acá se toca la gaita y la percusión. Sin embargo, nosotros hacemos muchas chacareras y los españoles se enganchan, les gusta el ritmo y hasta salen a bailar, aunque no conozcan la danza”.
Por causas y azares, así se hizo Julio, tan lejos, un espacio en la música. “Un día escucho que había un homenaje a Horacio Guaraní en Vigo, Pontevedra. Por supuesto fui, era en un sótano y yo pensé, acá no sé si salgo bien. Resulta que estaban todas las autoridades y el cónsul de Argentina. Al final del recital quedó la guitarra y el micrófono a disposición.
Entonces subí a cantar tres temas y les gustó y me pidieron que me anotara como artista y me alentaron. Hoy tocamos en distintos lugares, bares, teatros. Hay una movida de espectáculos que reúne a los argentinos. Fuimos a un festival en Valencia donde había mil personas. Acá encontré a dos argentinos que hacían rock, Hugo Diorno en guitarra y Néstor Martín en percusión y ellos me acompañan en el folclore”.
Ahora tenés tu propio disco, es un sueño realizado…“Si, a mí me apasiona la música, pero ¡sólo tenía dos videos en youtube! Me insistió mucho el representante de Demi Carabajal. Me decía que no podía ser que no tuviera un disco para mostrar lo que hacía. El disco se grabó en enero y febrero con músicos y técnicos de Santiago. Ellos son muy profesionales, yo solo no hubiera podido producir algo así. Estoy muy agradecido a las «Voces de Hoy «, Guillermo, Facundo y Nino Domínguez por su apoyo y colaboración para grabar el disco. Son mis amigos incondicionales”.
¡Suena muy bien, hay temas muy bellos, tu voz se luce y me gustó mucho el bandoneón! -le cuento- “Vos sabes que el bandoneonista murió hace pocos días de coronavirus -me dice apenado Julio-. Fue un gran músico, Raúl “Trapo” Ponce, muy importante en Santiago y no sabes lo humilde que fue y cómo nos ayudó. Creo que su participación en mi disco fue la última vez que tocó”.
“Hablando de pandemia, en Galicia y en España se volvió a complicar con el virus -me explica Julio- Ayer hubo 24 mil nuevos contagiados. Está volviendo peor que hace meses atrás. Hoy hay toque de queda”.
Julio escuchó folclore desde chico, en las calurosas noches santiagueñas “Yo iba a Santiago con mi mamá porque ahí vivía un sobrino. Así conocí el folclore. En Santiago a las diez de la noche la gente salía a la vereda con las guitarras y se armaban unas guitarreadas muy lindas”.
“Fui algunas clases con Alba Lacentra, mi vecina -recuerda Julio sus primeros rasguidos con la viola-. Y enseguida me largué solo y seguí aprendiendo con los hermanos Carlos y Pedro Colman. Carlos es un maestro. Ellos son los que mejor hacían la música de Santiago. Empecé a los 15 años en el dúo “Los del Salado” con Titino Garavento. Después fui la primera voz de “Los del atardecer” que integraban Carlos, Pedro y Leonardo Colman, Rubén Mc Cormack y Fabián Coppari. Con ellos tocamos mucho. Enseguida que armamos el grupo nos presentamos al pre Ayacucho y ganamos. También cantamos en radio Nacional”.
Ahora a difundir el disco. “Sí, yo iba a presentar el material del disco en febrero pasado en el festival de La Salamanca, en la Banda. Es un festival que reúne 20 mil personas todas las noches. Nosotros estábamos por subir al escenario y se vino una tormenta impresionante y se suspendió todo. El festival se postergó para marzo, pero yo ya estaba en España. Ojalá se pueda hacer en febrero próximo y pueda ir a presentar el disco a Santiago. Y mi sueño es presentarlo en Roque Pérez -dice Julio Teré-. Tengo muchos amigos en la música así que seguro se podría hacer. Sería lindo cantar a beneficio de una escuela ¡Ojalá pueda cantar en mi pueblo!”
Julio me cuenta sobre sus proyectos mientras hace fuego con sus amigos de Galicia. “Yo los acostumbre a comer asado -me dice Julio-. Encargo la carne de ternera y le pido al carnicero que me la corte más gruesa. Acá vale unos 9 euros ($ 900 el kilo). No es como la carne argentina pero es rica”. Y aconseja que en Galicia hay que comer el “cocido gallego”, es parecido a nuestro puchero, pero lleva chorizo colorado, panceta, morro y costillitas de cerdo, grelo (es una verdura) y garbanzos. “Es un plato típico ¡muy rico!” asegura el cantor.
El disco “Sueño de Salamanca” grabado en estudios Artefonic ya se puede escuchar en youtube. Además de la voz de Julio Teré, La ficha técnica se completa con Facundo Domínguez, Director musical, guitarras rítmicas y punteos; Guillermo Domínguez en el bombo, José María Gómez en piano, Raúl «Trapo» Ponce en Bandoneón; Miguel Ángel Domínguez recitado en Añoranzas, Pablo Caro como operador, Mezcla y Masterizado.
La obra incluye zambas, chacareras y dos temas del roqueperense. “Es el repertorio que yo venía haciendo -dice Julio- y dos temas propios, “Sueños de Salamanca” y “Corazón de Roque Pérez” que lo compuse para recordar al Negro Raúl “Urí” Wright. Te acordás del “Negro”, que siempre andaba colocando las antenas con Lister. Con él nos hicimos muy amigos y siempre nos daba una mano en la música. Se encargaba de hacer los asados y cuando tocábamos, si necesitábamos locutor, el Negro estaba siempre dispuesto. Lo recuerdo con mucho cariño -dice Julio Teré-, por eso digo en la chacarera “Negro de alma transparente, en que estrella vivirás, corazón de Roque Pérez, junto a mi viejo estarás”.